miércoles, 5 de noviembre de 2008


Hoy me devuelvo al infinito, porque ya no me pertenezco

"Hay que salvar, no a la flor, si no a las palabras.
En completa forma y agonía cae la noche sobre mi pecho. Arranca los vocablos uno a uno pretendiendo calmar la hemorragia. Lo cierto es que jamás cesará la embestida directa de oraciones. Sangrará desmesuradamente hasta el hastío, hasta acabar seca, hasta quebrarse y fundirse en la nada misma. Desangrada acabaré desapareciendo, el tiempo cubrirá las manchas y el rumor a muerte escupirá cenizas"

No hay comentarios: